Hoy hemos vuelto a pasear junto al Guadalquivir, a su paso por el salto de Casillas y junto a las instalaciones del Centro de Control Animal.
Es horroroso ver cómo está la zona de barro acumulado que ha reducido el cauce del río a menos de la mitad de lo que era en esta zona.
En las fotografías podéis ver cómo el lodo endurecido ha tapado por completo el paseo que existía, cómo ha enterrado árboles de gran tamaño y cómo el agua ha de dicurrir por el escaso sitio que le ha quedado.
No sólo se ha de limpiar el río a su paso por el casco histórico sino que hay que rehacer el cauce para facilitar que éste vuelva a correr por donde naturalmente siempre lo ha hecho. La vista al río desde el nuevo tramo de carretera recientemente inaugurado es espantoso. Tiene uno la sensación de estar en un lugar desértico dejado de la mano de Dios y del hombre. Desde las zonas próximas al nuevo puente podemos observar cómo los miradores muestran un panorama desolador.
Nos informa el señor Luis Rey públicamente a través de los diarios que tienen un presupuesto de unos tres millones de euros para reparar infraestructuras y limpiar arroyos y el río. Pero nosotros dudamos que ese dinero sea bien invertido y que zonas como la de la fotografía se recuperen totalmente como es la obligación de la administración. Y por supuesto que en estos casos la culpa y la responsabilidad es exclusiva de la Agencia Andaluza del Agua, de la Concejalía de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento de Córdoba.
PIDAMOS QUE TODO ESTO NO QUEDE EN UNA SIMPLE DECLARACION DE INTENCIONES Y EXIJAMOS QUE LAS AGUAS VUELVAN A SU CAUCE (Y NUNCA MEJOR DICHO).
Hace ya más de un año una terrible inundación truncó la vida de muchas familias de bien cordobesas. Más tarde, la tragedia se repitió pero en este caso sonaron más aun las desgracias referidas a zonas de cascos urbanos de distintas poblaciones.
¿Qué ha pasado con las promesas y con las responsabilidades? Pues, señores, no ha pasado nada. Los malos dirigentes siguen en sus puestos cobrando sus buenos sueldos a pesar de la pésima gestión que en cuestión del agua han hecho. Luis Rey, por lo que sabemos, sigue en su sillón al igual que Rafael Alvarez y acompañantes.También continua en su cargo doña Isabel Ambrosio y el delegado de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. ¿Por qué no se les sanciona por su pésima gestión de estas crisis?¿Por qué la incapacidad no está penada?¿Qué hubiese pasado si sus vidas fueran las que se vieran truncadas por la indolencia y la negligencia de un puñado de encargadillos o delegaduchos?
El desembalse descontrolado y fuera de tiempo que realizaron en estos inviernos por criterio de la Agencia Andaluza del Agua arruinó la vida de muchas personas que a día de hoy todavia están intentando (los que pueden) reconstruir sus viviendas y retomar su día a día cotidiano.
El río sigue inundado, cubierto, deformado, por el barro que se acumuló desde la primera inundación de forma que el cauce de este bello Guadalquivir es la mitad de lo que era en algunas zonas como por ejemplo, en el salto de Casillas. El paseo que antaño costó un buen dinero ha quedado totalmente inundado por el lodo hoy solidificado. Nos hablan de ilegalidades respecto a las viviendas por su proximidad al río pero tomemos por ejemplo de referencia el Centro de Control Animal que en dos ocasiones ha visto cómo el agua de este gran río lamía los límites de sus instalaciones, o cómo en el polígono de la Torrecilla se inundaban numerosas naves, etc...
Nuestro alcalde pide responsabilidades a don Luis Rey como responsable de esta Agencia Andaluza del Agua y exige una limpieza del cauce pero don Luis Rey dice desconocer tales peticiones y exigencias. ¿Cómo es posible? ¿Tan poco peso tiene este Ocaña que lo ignoran de manera tan descarada? El río lo limpias tú....No, el rio lo limpias tú... Es tu competencia.....No, es tuya porque es municipal..... NO SE ACLARAN Y NO SE QUIEREN ACLARAR. Y mientras, el río sigue sin limpiar, los paseos están ocultos bajo el lodo acumulado, el cauce del Guadalquivir aparece deformado, la gente se quedó sin casa y sin sosiego, etcétera, etcétera, etcétera.
¿Cuándo drenarán el río en la desembocadura del Guadajoz donde se ha formado una isleta central que desvía el curso del río dañando las instalaciones del aeropuerto (si a esto se le puede llamar aeropuerto) y se come las viviendas? No dan respuesta tampoco a esta necesidad de forma que si empiezan la casa por el tejado, construyendo (si es que lo construyen) la escollera en el margen del río antes de empezar por la limpieza del cauce, nos encontraremos peor que al principio de esta historia.
¿Por qué nos mienten?¿Cómo es que los medios de comunicación aparecen tan indolentes y faltos de crítica ante esta situación?¿Por qué no dan a conocer a la opinión pública qué ha sido del dinero que se debía destinar al encauzamiento del Guadalquivir?¿Por qué no indagan sobre la situación legal real de las parcelaciones que tanto satirizan?¿Por qué no presionan para conseguir el bien de todos los cordobeses promoviendo una acción pública activa que reclame aquello que dejaron sin hacer?
